El mundo moderno está marcado por las inmensas posibilidades tecnológicas que permiten realizar actividades que antes solo eran posible de forma muy limitada. Las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) han revolucionado la sociedad y son las herramientas que actualmente nos permiten estar hiperconectados.
Esta revolución ha provocado un profundo cambio en la forma de transmitir el conocimiento; es decir, también ha afectado a las formas de enseñanza y aprendizaje. Las TIC aplicadas a la educación han permitido tener modelos educativos mucho más amplios, abiertos y que están orientados a romper con los muros tradicionales que no permitían a las personas tomar cursos, talleres, diplomados o masters.
Con las TIC aplicadas a la educación en pleno apogeo, las posibilidades para aumentar el potencial de las personas son cada día más amplias, esto también se ve reflejado en las opciones que existen para prepararse mejor, aumentar el nivel de conocimientos y experiencias a través de modelos de aprendizaje a distancia y auto regulados.
Aprender a distancia
Ya no es necesario acudir a un aula para aprender. Las condiciones actuales permiten acceder al conocimiento y aprender cosas nuevas para estar actualizado constantemente, con la enorme ventaja de que se puede hacer desde cualquier sitio y, lo que es más importante, sin la presión de un programa rígido que exige cumplir un calendario. El alumno decide qué, dónde, cuánto y cuándo aprender.
Gracias a las TIC aplicadas a la educación, ahora existen posibilidades ilimitadas para acceder a la oferta educativa a distancia (cursos online, MOOC, blogs, foros, redes sociales, etc…) y poder hacerse de conocimientos en áreas que antes estaban restringidas para el público en general. Las TIC están impulsando un proceso de democratización del conocimiento.
Las aulas virtuales son ahora una excelente opción para seguir creciendo y capacitándose en el plano profesional y tener mejores oportunidades laborales. Con la posibilidad de estar en contacto con profesores y compañeros de todo el mundo, la educación a distancia ha eliminado las barreras espacio temporales y se ha convertido en una herramienta indispensable para las exigencias del mundo moderno.
Aprendizaje personalizado
Al contrario de lo que se pensaba hace algunos años, la educación digital con sus entornos interactivos ha fomentado un modelo de aprendizaje mucho más personalizado, ajustado a los tiempos individuales y permitiendo una atención más profunda a los alumnos gracias a los espacios de comunicación existentes entre los maestros y los estudiantes.
Además, los ritmos los plantea cada persona, ya que la educación virtual permite administrar los tiempos individuales y no hay horarios fijos, algo que rompe con el esquema tradicional de aprendizaje en donde todo pasa según lo marca un calendario predefinido.
Pero sobre todo, el alumno decide qué es lo que quiere o necesita aprender para alcanzar su objetivo.
Esta libertad de elección del qué se quiere estudiar, con quién va a aprender y cómo va a planificar el trabajo, empodera a la persona, incrementa su motivación y por lo tanto mejora la productividad y los resultados.
Sin embargo esta nueva forma de entender el aprendizaje con las TIC no es un camino sencillo, venimos de un sistema muy dirigido, con unos clichés muy rígidos, donde no hay posibilidad de salirse de la norma establecida, por lo tanto, su implementación implica un profundo cambio de mentalidad en la sociedad y como todo cambio debe gestionarse correctamente y necesita de tiempo y esfuerzo.
La educación online o a distancia por lo tanto es una herramienta muy eficaz para personalizar el aprendizaje.
Pero también en el modelo presencial, las TIC juegan un papel muy importante. Su uso en el aula permite al profesor buscar todo tipo de contenidos en la red, complementando de esta manera sus explicaciones o bien hacer uso de herramientas que le permitan dar una clase más amena o simplemente mejorar la gestión del aula, en definitiva facilitan recursos al docente para desempeñar aún mejor su función.
Permite al mismo tiempo explorar nuevos modelos de enseñanza, como es el caso del aula invertida, donde el alumno prepara la clase antes de recibirla y en el aula se exponen conclusiones, de esta forma el docente comprende mejor cuáles son los temas que más curiosidad despiertan en los alumnos y orienta sus explicaciones para que el tiempo en el aula sea más provechoso. Esta forma de impartir clases requiere de herramientas TIC en las que apoyarse para poder llevarse a cabo.
El aprendizaje basado en proyectos, el desarrollo de presentaciones, el trabajo colaborativo evitando las barreras físicas, la búsqueda y ampliación de información, etc… son también formas de personalizar el aprendizaje en las que las TIC juegan un papel fundamental.
Como decía al inicio de este artículo, las TIC aplicadas a la educación amplían el abanico de posibilidades, permitiendo estudiar como uno prefiera, usar aquellas inteligencias que cada persona tiene desarrolladas en mayor medida de forma innata (inteligencias múltiples) y por lo tanto haciendo del aprendizaje una experiencia única y personalizada.
En conclusión: las TIC son una herramienta necesaria en la educación para adaptar el modo de aprendizaje a cada alumno y ayudarle a sacar lo mejor de sí mismo, fomentar el pensamiento crítico y la responsabilidad. Requiere de esfuerzo y tiempo, pero son muchos los beneficios que lleva asociados, por lo que opino que la inversión está más que justificada.
Fuente: nubemia